Una de las metas de forma transversal en el campo de la fonoaudiología es lograr una comunicación efectiva en aquellos usuarios que no la han desarrollado aún, que la han perdido, o que se haya alterado por diferentes motivos. En el área de la comunicación en adultos, ésta se puede perder o alterar producto de un Accidente cerebrovascular, un Traumatismo encéfalo craneano, una enfermedad neurodegenerativa como lo es la Enfermedad de Parkinson o la Esclerosis lateral amiotrófica, entre otras muchas razones. Las personas pueden ver limitada su capacidad para transmitir un pensamiento, para comprender una instrucción, para poder escribir, para leer, para gestualizar o para poder hablar. En términos simples esto es lo que ocurre y es lo que se les explica a los familiares y/o cuidadores de estos adultos que han visto limitada su capacidad de comunicación.
Para nosotros los fonoaudiólogos y fonoaudiólogas es muy importante que la familia comprenda las limitaciones comunicativas del usuario y las formas que existen para resolverlas durante el proceso de rehabilitación ya que ellos serán nuestros coterapeutas. Esta palabra siempre ha tenido mucha importancia en nuestra labor, pero hoy en día cobra aún más relevancia debido a la contingencia mundial por la cual atravesamos. Los usuarios que tienen limitaciones en la comunicación necesitan mantenerse activamente estimulados para progresar con su tratamiento y en ese proceso la familia es fundamental. Si no existe un interlocutor a quien transmitir nuestros pensamientos o necesidades entonces la comunicación no existe.
Ahora bien, ¿qué ocurre con los adultos mayores que viven solos o que han visto restringido su círculo social porque no pueden salir de casa producto de esta pandemia por la cual estamos atravesando? ¿Qué ocurre a nivel cognitivo si la comunicación con otras personas disminuye o no existe? ¿Qué ocurre anímicamente si estos adultos mayores no cuentan con la tecnología necesaria para poder comunicarse con sus familiares o amigos que están lejos? ¿Qué ocurre si estos adultos mayores con dificultades comunicativas además cuentan con limitaciones sensoriales a nivel auditivo o visual como para manejar un teléfono, Tablet o computador? La telerehabilitación es una herramienta fundamental en la cual apoyarnos para resolver algunas de estas interrogantes así como la valiosa labor de los familiares en todo el proceso.
Los avances tecnológicos que se han desarrollado con el pasar de los años, nos invitan a darle un nuevo uso con enfoque en la rehabilitación. En un artículo publicado este año por Cotelli et al. en el Journal of Telemedicine and Telecare revela la importancia de la telemedicina como una herramienta terapéutica innovadora y eficaz en adultos mayores sanos, con deterioro cognitivo e incluso en procesos demenciales. La investigación aporta antecedentes interesantes, ya que los hallazgos establecen que la telemedicina desde disciplinas como la Fonoaudiología genera los mismos efectos sobre la cognición, el lenguaje y el habla de las personas, siendo estos resultados similares a los obtenidos en una terapia presencial.
Se inician nuevos desafíos en el ámbito de la telerehabilitación para quienes ya nos desenvolvemos en el plano terapéutico y para los estudiantes que han nacido en esta era digital, lo que les permite potenciar aún más su creatividad para enfrentar los nuevos desafíos impuestos por esta pandemia.