A continuación, les compartimos la entrevista que la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile le hizo a Patricia Águila, Académica e Investigadora del Laboratorio de Microbiología Molecular de la Universidad Austral de Chile, Sede Puerto Montt.
Para la académica del Laboratorio de Microbiología Molecular de la Universidad Austral de Chile, sede Puerto Montt, los microplásticos actúan como vehículos que no solo acumulan tóxicos persistentes, sino también patógenos peligrosos para la salud humana, ya que el riesgo de contaminación contribuye en la propagación de enfermedades.
Patricia Águila es una de las autoras de la investigación publicada recientemente en la revista Marine Drugs donde se centra en la identificación y análisis de bacterias capaces de degradar los ecosistemas marinos en nuestro país. En su opinión, estos hallazgos son un impulso para continuar con nuevas investigaciones que contribuyan a la protección y recuperación de la biodiversidad afectada por actividades humanas. Más de sus reflexiones, en la siguiente entrevista.
Situación actual de la contaminación de microplásticos en Chile
”Sabemos que la producción de plásticos ha aumentado considerablemente en las últimas décadas y se espera un crecimiento exponencial en los próximos años. Esto genera una gran preocupación debido a la acumulación de plásticos en los océanos y otros ecosistemas. Los plásticos no se degradan completamente, y se fragmentan en partículas pequeñas llamadas microplásticos, que miden entre una micra y cinco milímetros.
Actualmente, la contaminación por desechos plásticos se ha convertido en una crisis ambiental global. Se han encontrado microplásticos en diversos ecosistemas, incluso en tejidos humanos. En cuanto a los océanos, se estima que ingresan aproximadamente 1.5 millones de toneladas de microplásticos cada año, lo que provoca un impacto ecológico significativo.
Estos microplásticos afectan procesos esenciales para varios organismos, como la fotosíntesis y el crecimiento del fitoplancton, ralentizan el movimiento del zooplancton e incluso pueden transportar microorganismos patógenos o potencialmente patógenos a zonas oceánicas prístinas.
En 2022, nuestro grupo de investigación reportó la presencia de comunidades microbianas adheridas a microplásticos en las costas de la región de Los Lagos. Encontramos distintos tipos de microplásticos, entre ellos polipropileno, polietileno, nylon y poliestireno, en aguas cercanas a centros de salmonicultura.
La capacidad de los microplásticos para transportar bacterias es preocupante, ya que algunas pueden ser patógenas o resistentes a antibióticos, y podrían propagarse a áreas prístinas. Por ejemplo, se sabe que ciertas especies del género Vibrio son patógenas para humanos. Nuestro equipo identificó bacterias de la familia vibrionaceae adheridas a partículas de polipropileno polietileno y poliestireno en esta región .
En general, la contaminación por microplásticos está relacionada con actividades humanas, entre las cuales destaca la salmonicultura. En zonas cercanas a centros de cultivo de salmón en la región de Los Lagos, hemos detectado microplásticos similares a los mencionados anteriormente. La salmonicultura podría contribuir a la presencia de microplásticos en áreas donde no deberían estar. Además, estos microplásticos no solo retienen compuestos orgánicos persistentes, sino también bacterias potencialmente patógenas”.
Consecuencias nocivas para los ecosistemas y las personas
”A corto plazo, se proyecta un aumento continuo de la crisis del plástico, con un incremento constante en la contaminación tanto en volumen como en la presencia de microplásticos en diversos ecosistemas, incluyendo aire, suelo, agua y la cadena alimentaria. La pandemia también agravó el problema debido al mayor uso de plásticos de un solo uso. Además, la acuicultura contribuye con el escape de redes, mangas, cuerdas y boyas que se dispersan en el ambiente, especialmente visibles en la región de Los Lagos.
Nuestra proyección indica que esta crisis continuará intensificándose, principalmente en los océanos. No basta con limpiar las playas de basura plástica, también es fundamental generar conciencia en la población y promover responsabilidades tanto en productores como en consumidores de plástico. Chile necesita desarrollar una política pública específica sobre residuos plásticos y microplásticos que permita coordinar y potenciar las acciones que actualmente realizan el sector público, la sociedad civil, la academia y las empresas. El objetivo es reducir, recuperar y prevenir la generación de plásticos y sus impactos en los ecosistemas acuáticos, así como proteger la economía y el bienestar de las personas.
Nuestra hipótesis fue que las personas que consumen alimentos marinos, especialmente choritos -que son filtradores- podrían presentar microplásticos en su organismo. Al ser filtradores, estos moluscos acumulan contaminantes, incluyendo microplásticos, que luego pueden ingresar a quienes los consumen”.
Aporte que podría realizar el Congreso Nacional
”Creemos que el Congreso debe involucrarse activamente en el problema de la acumulación de plásticos en las costas de Chile y del mundo. Es fundamental reconocer que somos parte del problema, pero también queremos ser parte de la solución. Para ello, es necesario reducir la producción y el uso de plásticos en los océanos mediante el fortalecimiento de regulaciones para la fiscalización sobre los plásticos de un solo uso, y un marco más amplio para políticas que promuevan su disminución.
Además, se requiere impulsar más investigación y el desarrollo de alternativas sostenibles, fomentar la reutilización, establecer mecanismos de gestión de residuos más efectivos y apoyar iniciativas de concientización pública sobre la limpieza ambiental. También es crucial fortalecer la cooperación internacional en esta materia.
Desde la región de Los Lagos, hemos publicado artículos que evidencian la presencia de bacterias potencialmente patógenas y microplásticos, principalmente en esta zona. Actualmente, estamos trabajando en estudios sobre agua de mar y aguas costeras cercanas a la salmonicultura, y pronto publicaremos resultados que confirman la presencia de microplásticos no solo en el agua, sino también en sedimentos marinos y tejidos humanos, como la sangre. Es difícil creerlo hasta que uno observa esas fibras de microplásticos presentes en sangre, agua y sedimentos marinos”.
Lee la nota original aquí: https://www.bcn.cl/observatorio/asiapacifico/noticias/patricia-aguila-investigacion-microplasticos-oceanos