En el Centro Dos Esteros de la Sede Puerto Montt de la Universidada Austral de Chile se realizó una enriquecedora jornada de educación ambiental destinada a profesores y profesoras de la comuna de Calbuco.
Esta actividad fue organizada por el equipo de Educación Ambiental del proyecto “Análisis de la situación actual del Santuario de la Naturaleza Isla Kaikué-Lagartija, con énfasis en dimensiones estratégicas: el desarrollo del territorio y la educación socioambiental comunitaria”, del fondo de Protección Ambiental FPA 2023.
La jornada fue liderada por el ingeniero civil ambiental Mg. Diego Reyes, académico del Instituto de Agricultura de la Universidad Austral de Chile, Sede Puerto Montt, quien estuvo acompañado por los profesionales Jonathan Arcos y Marisel Santana; las estudiantes de Ingeniería Ambiental y Trabajo Social: Paula Altamirano, Francisca González, Jennyfer Loyola, María Elena Olave y Paulette Velásquez, miembros clave del equipo.
La jornada tuvo como objetivo principal fortalecer las capacidades de los docentes para abordar temáticas de gestión ambiental pública y conflictos ambientales, temas fundamentales para la protección y conservación del Santuario Isla Kaikué Lagartija. Este santuario, reconocido por su biodiversidad y servicios ecosistémicos, enfrenta amenazas constantes, lo que hace crucial el compromiso y la participación de las comunidades aledañas.
Durante los meses de junio y diciembre, el equipo del proyecto visitó distintos colegios de Calbuco, sensibilizando a estudiantes sobre las amenazas y objetos de conservación de la isla. Sin embargo, esta vez la atención se centró en las y los profesores, quienes tienen un rol clave en la formación de niños en educación ambiental. El currículo escolar actual integra contenidos de educación ambiental, y quisimos abordar estos temas desde una perspectiva más amplia, que incluyera la gestión ambiental pública y los conflictos ambientales”, explicó Reyes.
La jornada, que se extendió por cuatro horas, se dividió en dos grandes bloques:
1. Conservación y amenazas del santuario: Jonathan Arco, también integrante del proyecto, expuso sobre las características del santuario, sus principales amenazas y objetivos de conservación. Esta sesión culminó con una actividad práctica de cartografía participativa, donde los profesores identificaron en mapas las ubicaciones de sus colegios, puertos industriales, y zonas de avistamiento de aves. Este ejercicio les permitió empatizar con el entorno y reconocer elementos que generaban sensaciones tanto positivas como de preocupación.
2. Resolución de conflictos ambientales: La segunda parte se enfocó en conceptos clave como conflictos ambientales, proyectos ambientales y los procesos necesarios para la evaluación ambiental. Reyes abordó la función de organismos como el Ministerio del Medio Ambiente, la Superintendencia del Medio Ambiente y los Tribunales Ambientales, así como la importancia de la participación ciudadana en la resolución de conflictos. Además, se exploraron las responsabilidades de entidades locales como la Municipalidad de Calbuco en la protección del santuario.
Los profesores participaron activamente durante toda la jornada, planteando dudas y compartiendo sus experiencias. “Fue un espacio de aprendizaje mutuo, muy enriquecedor, donde se generaron compromisos de continuar trabajando juntos”, destacó Diego Reyes.
«Esta iniciativa refuerza la importancia de integrar a los educadores en los esfuerzos de conservación y sensibilización, garantizando que las futuras generaciones comprendan y valoren la riqueza natural de su entorno. El equipo del proyecto continuará brindando apoyo a esta red y desarrollando actividades que fortalezcan las capacidades locales para la protección del santuario», señaló Marisel Santana, coordinadora de Vinculación con el Medio de la Universidad Austral de Chile.